Dir: Larry Charles | Int.: Sacha Baron Cohen | EEUU 2008 | 81 min.
Sacha Baron Cohen rebasa, con un humor vitriólico, las fronteras de lo “aceptable” para destapar la superficialidad de un sociedad que valora y ansía la fama por encima de todo.
Brüno será el máximo exponente y, al mismo tiempo, expositor, de una legión de personajes arrojados al escenario mediático, intentando ser “cool” por todos los medios. Él, gay neonazi y esperpento, encajará con escandalosa facilidad en un mundo de redentores de homosexuales, madres de niños actores, amantes esclavos, actores convertidos en benefactores de la Humanidad, políticos marketinizados, periodistas mafiosos, audiencias borderline, fundamentalistas de todo… En resumen, frikis capaces de cualquier cosa con tal de que le planten una cámara delante.
Brüno es una película irreverente y cerda, que se descojona de nuestra doble moral y que demuestra cómo los medios son los que mueven la frontera entre lo que es guay y lo que aún no lo es. Y, a pesar de que, cinematográficamente, la peli no vale un churro, porque es una sucesión de situaciones apenas hilvanadas por una trama absurda, Brüno funciona. Y sienta hasta mal. Seguramente porque se descojona de todos nosotros, compradores vegetales de una escaparate mediático igualito al que muestra el film, y que nos sabemos y miramos cada día, con pasmosa estupidez. No gustará a la mayoría.
J.
BRÜNO
jul 15, 2009
2 comments
A mí me divirtió muchísimo y creo que ese es su propósito. Tiene gags memorables. Ese mando a distancia por Dios!!
ResponderEliminarEstá llena de gags para la historia, totalmente de acuerdo.
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