Este finde, hemos optado por una cartelera de entretenimiento y evasión. Una de las pelis que vimos fue Skyline, un film sobre la ya manida invasión extraterrestre. Pues, ¡alerta!, porque, a mi parecer, mas que extraterrestres, lo que nos invade es un truño de esos que dejan marcas.
Los hermanos Strause, de la superfactoría de efectos especiales Hidraulx, han vendido este film con el argumento de cine de alienígenas indie, por el poco dinero que han invertido en efectos, sólo 20 millones de dólares (normalmente su coste es de 200 kilos). De este "modesto" presupuesto, destinaron medio millón a los actores y guión...
El resultado, es una cinta con muy buenos efectos y nada más. Y cuando decimos nada más, es literal. Los extraterrestres, al parecer, debieron exterminar también a los guionistas, a la directora de casting y a cualquier persona con un mínimo de talento. Durante toda la peli estás esperando que los voraces alienígenas se carguen a los actores, para que dejen de hablar y de interpretar unos diálogos que parece que los ha escrito un niño de 9 años.
Mejor que los Strause se sigan dedicando a los efectos especiales, y que dejen el cine a alguien que sepa contar historias. Una absoluta mierda.
J
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Pues a mí me pareció entretenida, claro que no es ninguna obra maestra, pero ni lo pretende. La falta de pretensiones es su mayor virtud...
ResponderEliminarEntretenida cuando los bichos engullen a los pelmazos de la peli. Lo que no sé es porqué se quedan luego con sus cerebros, así se vuelven igual de idiotas que ellos...
ResponderEliminarPero estoy de acuerdo en que es Serie B sin pretensiones.